Las mejores canciones de Nico: 20 clásicos enigmáticos
Las mejores canciones de Nico recorren un espectro muy amplio que va desde su lucha iconoclasta hasta la complacencia artística.
¿Quién podría hacer que Lou Reed se pareciera a Brian Wilson, convertir el bombeo del órgano en un instrumento de rock y llevar las visiones más oscuras de The Doors a un lugar todavía más apocalíptico? Nadie más que Nico. Nacida bajo el nombre de Crista Paffgen en Colonia, Alemania, fue actriz de cine, artista discográfica y modelo exitosa antes de emigrar a los Estados Unidos y entrar en la órbita de Andy Warhol. Éste último fue el autor intelectual de la asociación de corta duración pero legendaria entre Nico y sus compañeros de avant-rock The Velvet Underground. Luego de esta colaboración, ella realizaría una carrera solista contundente que rompió incluso más reglas que las que hicieron las entregas de VU, aplastando convenciones mucho más allá de los límites más lejanos del rock.
Con su estilo vocal andrógino y su política en contra de la estructura tradicional de la canción, Nico era “No Wave” años antes de que se acuñara el término. Una gran cantidad de subgéneros subversivos, incluidos el post-punk y el gótico, están en deuda con ella. Desde el pop barroco otoñal de Chelsea Girl, su debut en solitario de 1967, hasta la ingeniosa abstracción de The Marble Index, producido por John Cale, y otros trabajos más, Nico creó una inquietante e hipnótica serie de clásicos de culto. Fue una carrera que trágicamente se vio truncada cuando un accidente en 1988 llevó su problemática vida a un final prematuro.
Es un desafío identificar con precisión el punto de entrada ideal al catálogo de Nico, un acervo tan complejo como imponente. Así que, en lugar de reducirlo a un solo punto, aquí hay 20 de las mejores canciones de Nico que atraviesan todo su espectro, desde su lucha iconoclasta hasta la complacencia artística.
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The Velvet Underground
(Femme Fatale, I’ll Be Your Mirror, All Tomorrow’s Parties)
Cuando Warhol impuso a Nico en The Velvet Underground como su cantante residente, la banda inicialmente se indignó. Sin embargo, es imposible negar su impacto en las grabaciones del debut atemporal del grupo, The Velvet Underground & Nico. A pesar de lo renuente que había sido Lou Reed para ceder las funciones vocales principales a Nico, el tiempo ha demostrado que ella encajaba perfectamente para este papel. Con una entrega sombría, la cantante de tono ronco parece personificar al personaje intimidante que ella describe en “Femme Fatale”. Asimismo, si “I’ll Be Your Mirror” hubiera sido cantada por la voz juvenil del Reed de aquel momento, esta balada probablemente no hubiera tenido la seriedad que le aportan los tonos de voz Nico. Del mismo modo, la decadencia gloriosamente condenada de “All Tomorrow’s Parties”, al día de hoy, se siente inseparable del sonido de la voz de esta cantante alemana.
Covers de canciones
(These Days, I’ll Keep It With Mine, The End)
El primer álbum de Nico fue escrito casi en su totalidad por otros autores, incluyendo a sus compañeros de banda de VU. En éste se incluyó “These Days”, de uno de sus muchos pretendientes y acompañante ocasional, Jackson Browne, quien en aquel momento todavía era un adolescente. Jackson apenas grabaría la canción para sí mismo hasta años después. Sin embargo, en 1967, ese cansancio por el mundo que expresa la canción seguramente tenía mucho más que ver con Nico que con él, ya que ella era 10 años mayor que Jackson y mucho más experimentada en esta vida. En este álbum también aparece “I’ll Keep It With Mine” de su ex amante Bob Dylan. Aunque fue editada por primera vez por Judy Collins, se dice que esta balada cocida en el horno de la compasión, fue escrita para y sobre Nico. Ella la habita con una intimidad que parece prueba suficiente para confirmar esa historia sobre el origen de la canción.
Después de Chelsea Girl, Nico se concentró en grabar su propio material. Sin embargo, en 1974 Nico demostró que su gran potencia se encontraba en su particular manera de interpretar covers. Esto es algo que queda claro en su versión de “The End”, de The Doors, de un álbum con el mismo nombre. Con el compañero de banda de VU, John Cale, haciendo cosas indescriptibles en un piano y Phil Manzanera de Roxy Music ofreciendo algunos licks siniestros, Nico continúa donde Jim Morrison (otro antiguo amor) dejó la canción original, elevando el nivel de fuego y azufre de la composición a un nivel mayor y estableciendo una plantilla que Nick Cave, y otros tantos, adoptarían en el futuro.
Éxitos que se nutren del armonio
(Janitor of Lunacy, It Has Not Taken Long, Konig)
A Nico no le venía bien algo tan convencional como la guitarra o el piano. En cambio, ella tocó la mayoría de sus canciones detrás de un armonio. Este instrumento del siglo XIX es esencialmente un órgano de bomba portátil, con un sonido serpenteante y cautivador, que sale a relucir en algunas de las canciones más inquietantes de Nico. “Janitor of Lunacy” del Desertshore de 1970 es una petición de auxilio ante lo absurdo del destino, supuestamente grabada en respuesta a la reciente muerte del amigo de Nico, Brian Jones de los Rolling Stones. Su sentimiento turbulento y encantador la convirtió en una de sus canciones más emblemáticas.
Mientras tanto, la cautivadora “It Has Not Taken Long” de The End se ejecuta detrás de un riff repetitivo de armonio que suena sobre lo que se escucha como una combinación entre un corazón que late y un disco que salta. Cantado en la lengua materna de Nico, el solo de voz y armonio “Konig” del disco Camera Obscura de 1985 contrasta drásticamente con la producción orientada a la electrónica que John Cale propone en la mayor parte de este álbum. Una muestra de que este viejo instrumento tenía un lugar importante en el corazón de la cantante.
New Wave Nico
(Genghis Khan, One More Chance, Win a Few, Fearfully in Danger)
Cuando Nico adoptó un sonido teñido de New Wave en los años 80, en realidad se trataba más sobre el espíritu de la época finalmente poniéndose al día con la pionera de lo “alternativo” y no al revés. En Drama of Exile de 1981, la guitarra post-punk junto con el ritmo casi bailable de “Genghis Khan” y la vibra de Bowie-en-Berlin de “One More Chance” ayudaron a que la cantante, ahora con una voz aún más grave, llegara a los oídos de una nueva generación. Cuando John Cale recuperó la silla de productor en Camera Obscura, la seriedad sombría de Nico se vio contrarrestada por un presagio de la electrónica de los 90 en “Win a Few” y una estructura minimalista pero insistente de synth-pop en “Fearfully in Danger”.
Exploraciones de otro mundo
(Lawns of Dawn, Evening of Light, We’ve Got the Gold)
Pareciera que John Cale fue enviado a este mundo para producir a Nico. Sus radicales obras tuvieron un impacto clave en la psique de la cantante y sus arreglos supieron darle un empujón vital a su expresión artística. Tal es así, que en el camino, forjaron visiones deliciosamente pesadillescas en algunos de sus mejores álbumes. En The Marble Index de 1968, “Lawns of Dawn” se siente como estar atrapado dentro de una caja de música carnavalesca, mientras que “Evening of Light” comienza simple y serena y gradualmente se convierte en un alboroto catastrófico. En el álbum The End…, “We’ve Got the Gold” comienza sonando como si estuvieras en la presencia de una banda entera desafinando, algo que se vuelve aún más inquietante a medida que avanza la canción.
Interpretaciones conmovedoras
(My Only Child, Afraid, My Funny Valentine, The Fairest of the Seasons)
Por otro lado, Cale también fue capaz de resaltar la descarada belleza de la música de Nico. En Desertshore, su voz se une con sorprendente ternura a la armonía de los demás cantantes en la casi a capella “My Only Child”, la cual fue aparentemente inspirada en su hijo pequeño, Ari, cuya voz aparece en la siguiente canción del álbum y cuya imagen adorna su portada. La balada de piano de salón “Afraid”, del mismo álbum, también tiene una dosis de emoción delicada que hace que se te salgan las lágrimas.
La interpretación más “bonita” de Nico, convencionalmente hablando, se encuentra sorprendente en medio de las aventuras electrónicas de Camera Obscura. En esta pieza la cantante aparece como una especie de Marlene Dietrich contracultural en una versión tranquila y lista para el cabaret de “My Funny Valentine” de Rodgers & Hart. Se podría decir que el potencial para crear este tipo de piezas siempre estuvo ahí desde el principio. Esto se puede ver en su LP debut, que comienza con la melodía inédita de Jackson Browne “The Fairest of the Seasons”, una balada agridulce que en retrospectiva podría leerse como un presagio de la historia de amor entre Nico y Browne.
¿Omitimos alguna de las mejores canciones de Nico? Háznoslo saber en la sección de comentarios.