Bases militares, código Morse y amor juvenil: los inicios de Johnny Cash

El nombre de Johnny Cash comenzó a ser reconocido a través de todo Estados Unidos a finales de 1955 cuando su sencillo para Sun Records “¡Cry!  Cry! Cry!” (un gran éxito en Memphis) pasó exactamente una semana en las listas de música country a nivel nacional. Parecería impensable que tan solo cinco años antes, durante sus cuatro años en la Fuerza Aérea de Estados Unidos, estuviera involucrado en un tipo de comunicación muy diferente.

Mientras crecía en Arkansas, Cash ya había dado indicios de su destreza como músico, incluso antes de llegar a la adolescencia. Más tarde, a la edad de 18 años, Johnny se alistó en la Fuerza Aérea poco después de que la invasión de Corea del Norte al sur de la frontera señalara el comienzo de la Guerra de Corea y Estados Unidos decidiera formar parte de ella. Para Cash, alejarse de su hogar resultó ser una excitante manera de escapar de las limitaciones de ser un jóven atrapado en el pequeño pueblo de Dyess.

Ser un operador de radio antes de estar en la radio

Cash comenzó su entrenamiento básico en la Base de la Fuerza Aérea de Lackland en Texas y aprovechó la oportunidad para aprender a ser operador de radio. Con los recursos limitados por el conflicto, el entrenamiento de reclutas era escaso, por lo que tan sólo unas semanas después, el 21 de septiembre de 1950, en la Base de la Fuerza Aérea Keesler en Biloxi, Mississippi, Cash comenzó a entrenar para interceptar correspondencia soviética en código Morse. Más tarde, recibió un poco de instrucción adicional en el Servicio de Seguridad de la USAF en la base de Brooks, cerca de San Antonio.

Johnny y los Landsberg Barbarians

Mientras tanto, Cash había comenzado a interpretar temas country populares con un grupo, los Landsberg Barbarians, a la par que desarrollaba sus habilidades como operador de radio. En lo que fueron unos turnos largos e intensos, pudo transcribir cerca de 40 palabras por minuto. Más tarde en su vida, reflexionando acerca de cómo arrastraba consigo su paso por la la vida militar diría “Pasé 20 años en la Fuerza Aérea de 1950 a 1954”. Una vez que llegó a Sun y contó con el apoyo de Sam Phillips, lo que los militares dejaron ir se convirtió en una gran triunfo para la música.

En el verano de 2020 llegó a la pantalla grande la historia (en gran parte desconocida) de Vivian Liberto, a través de la película My Darling Vivian (Mi querida Vivian) del director Matt Riddlehoover. Esta cuenta la historia de la relación de Vivian con Cash, cómo se convirtió en la madre de sus cuatro hijas, incluida la cantautora Rosanne, ganadora de múltiples premios Grammy, y los esfuerzos para lidiar con su exitosa carrera. Vivian murió en 2005, justo antes del lanzamiento de la aclamada película biográfica Walk The Line, en cuyo argumento se la pasó, en gran medida, por alto.