ANUNCIO PUBLICITARIO

‘Arrival’: el álbum clásico de ABBA que anotó un gol ganador

El cuarto álbum de ABBA, “Arrival” se convirtió en el álbum mejor vendido en Reino Unido en 1977 y es testimonio de sus mejores momentos.

Publicado el

de

de

ABBA Arrival
Portada: Polar Music

Lanzado el 11 de octubre de 1976, el cuarto álbum de ABBA, Arrival, marcó el momento en el que todo se aceleró para la banda. El concurso de Eurovisión de 1974 había quedado atrás hacía dos años y estaban tomando impulso. Los éxitos en Reino Unido, “Mamma Mia” y “SOS” habían sido una sorpresa de alguna manera; ningún ganador de Eurovisión había logrado utilizar esa visibilidad para lanzar una carrera de ese modo.

Escucha Arrival ahora mismo.

Arrival se lanzó apenas seis meses después de la primera colección de grandes éxitos del grupo, era una bienvenida de 10 canciones a esa creciente confianza en ellos mismos – era el tipo de álbum que se crea cuando coinciden circunstancias fortuitas para que surja una rara supernova de oportunidades.

El hecho de que Arrival contenga el mejor momento de ABBA, la eufórica “Dancing Queen” parece muy apropiado. La cantante Anni-Frid Lyngstad recuerda que la canción, que originalmente se llamaba “Boogaloo” parecía especial, incluso desde que era un demo; la conmovía tanto que lloraba. La canción fue la primera del álbum en ser lanzada como sencillo, llegó al número uno en Reino Unido y se convirtió en más grande éxito de la banda en Estados Unidos, donde también encabezó las listas de popularidad.

Se comenzó a trabajar en Arrival el año anterior, pero se completó hasta el verano de 1976, cuando “Fernando” – grabada originalmente por Frida solamente y añadida a la edición australiana del álbum, junto con sus posteriores reediciones internacionales – estaba a la cabeza de las listas de popularidad, En esas sesiones finales se concluyó “My Love, My Life”, el tipo de balada dolorosa que ABBA sabía interpretar tan bien – emotiva, con una melodía digerible que se desarrolla lentamente al inicio. Continúa siendo una de las grabaciones clásicas de Agnetha Fältskog y una pieza sobresaliente del disco.

“When I Kissed The Teacher”, escrita anteriormente, abre el álbum con ecos del sonido girl-pop de los años 60, revestido del brillo supersónico de un estudio de los años 70, que, a su vez, ilustra las razones por las que Benny Andersson y Björn Ulvaeus eran los mejores productores de esa era y unos compositores magistrales. “Dum Dum Diddle” es divertida y frívola: es una de esas melodías pegajosas que, durante años, alimentaron la reputación de la banda como mercaderes de pop bobo y barato que privaría a los suecos de una evaluación crítica justa. Sin embargo, dentro de la canción está albergada la alegre melancolía que es la base de las mejores melodías de ABBA: la ligeramente masoquista celebración al centro de tanta tristeza; el último baile que se hace mientras el mundo se derrumba alrededor.

“Knowing Me, Knowing You” – que se mantendría a la cabeza de las listas de popularidad durante cinco semanas después de su lanzamiento al año siguiente – es otro clásico de ABBA. Benny considera que es una de las cinco mejores grabaciones de la banda, con su sabia letra que prevé un futuro desamor que nadie podía haber visto venir. “Money, Money, Money” tenía la poco envidiable tarea de ser la sucesora de “Dancing Queen” como sencillo cuando se lanzó al final del año. Los altos lugares que alcanzó en las listas de popularidad de todo el mundo indican que tuvo un admirable desempeño.

Por otro lado “Elsewhere” debe su rítmica melodía disco a la era en que fue escrita. Realmente no es difícil imaginar a alguien como Olivia Newton-John cantar esto, aunque no le hubiera hecho justicia. Solamente la casi perfecta afinación de Agnetha y Frida hace honor al rango tonal de la canción y su inquieta energía. “Why Did It Have To Be” es una rara oportunidad para que Björn luzca como vocalista principal, acompañado en algunas partes por Agnetha y Frida. Al escucharla por primera vez, suena como una pista de la vieja escuela que hubiera grabado la antigua banda de Benny, The Hep Stars. Esta canción, que aparenta la simpleza de un vals, se va convirtiendo en algo más especial entre más veces se le escucha.

“Tiger” tiene una intensidad frenética. La canción tiene un riff incesante que parece perseguir al escucha y parece muy diferente al resto del álbum. Si ABBA pudiera decir que estuvo cerca de escribir rock, éste sería un gran ejemplo de ello. Hay destellos de musicalidad que llevan a la canción hacia un sonido más pop, pero se trata de una rareza pegajosa con letra intrascendente que al inicio confundió a los fanáticos, quienes se estaban acostumbrando a un discurso más emocional y profundo de la banda. La canción que da título al disco también parece extraña al principio – las voces de Agnetha y Frida se escuchan solamente en una armonía coral fugaz, mientras que la nostálgica melodía se desarrolla durante sus tres minutos de duración. Nació del amor que tenía Benny por el folclor sueco y originalmente se llamaba “Ode To Dalecarlia”, antes de que cambiara de nombre cuando se le dio título al elepé.

Con tan sólo 10 canciones, este ecléctico álbum a menudo pareciera haber sido escrito para un musical y pareciera estar buscando a la puesta en escena a la que pertenece. En muchos sentidos, eso es lo maravilloso de la banda – las canciones que ABBA creaba eran lienzos en los que todo el mundo podía trazar su perspectiva emocional. Con una perspectiva engañosamente simple y una ejecución terriblemente meticulosa lograban una narrativa magistral.

El mundo se enamoró terriblemente de Arrival. Rompió récords en todos lados e incluso tuvo éxito en Estados Unidos – un mercado que sucumbiría a los encantos del pop sueco hasta la siguiente generación – donde entraría en las listas de popularidad el 22 de enero de 1977. En cambio, en Reino Unido fue el álbum más vendido de 1977 y se convirtió en nada menos que una sensación nacional en Australia – el segundo álbum en vender más de un millón de copias en la historia del país.

No había una mejor banda de pop que estuviera tan enfocada en una simple meta: crear la canción pop de tres minutos perfecta. Arrival presenta a sus cuatro estrellas en su mejor momento – seguras de sí mismas y con naturalidad – y con justa razón se le considera uno de los álbumes clásicos del pop.

Aquí puedes comprar Arrival.

Haz clic para comentar

Deja tu respuesta

Your email address will not be published. Required fields are marked *

uDiscover Music - Back To Top
uDiscover Music - Back To Top