‘Chunga’s Revenge’: Encontrando a Frank Zappa en modo Ataque Total
‘Chunga’s Revenge’, el tercer álbum de Frank Zappa en el espacio de un año, abarca desde el hard rock hasta el doo-wop y el avant-garde, superando la prueba del tiempo.
Deliciosamente subversivo, Chunga’s Revenge es el tercer y último álbum que Frank Zappa lanzó en 1970, un año fértil que ya lo había visto publicar Burnt Weeny Sandwich y Weasels Ripped My Flesh. Zappa le dio al álbum un estatus de solista, pero solo en el nombre, porque en realidad el álbum introdujo lo que era una nueva variante de The Mothers: Jeff Simmons (bajo), George Duke (teclados y trombón), Aynsley Dunbar (batería) y el polifacético Ian Underwood, quienes, a su vez, le dieron la bienvenida al grupo a las exquisitas voces de los ex Turtles Howard Kaylan y Mark Volman (anunciados, por razones contractuales, como Flo & Eddie).
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Las sesiones de Chunga’s Revenge tuvieron lugar entre principios de julio de 1969 y el verano de 1970, con Zappa en el cuarto de controles de cuatro estudios diferentes, incluido el legendario Trident en Londres. La canción “The Nancy And Mary Music” también cumplió con todos los requisitos de la estética de Zappa, siendo una nueva interpretación en vivo de una pieza avant-garde, que a su vez, fue grabada en un ensayo épico y total de unos Mothers súper energizados, en el Teatro Guthrie, Minneapolis.
Estilísticamente ambicioso – como siempre – Chunga’s Revenge incluye comedia burlesca, jazz fusión y algo de poderoso blues-rock, con las letras centradas en las escapadas de la vida en la carretera (y en el dormitorio) de un músico que trabaja duro.
Chunga es el favorito de muchos fanáticos de Zappa; ellos gravitan hacia la guitarra seductora en “Transylvania Boogie”, bajan al blues divertido de “Road Ladies” y saborean “Twenty Small Cigars” (reelaborado de las sesiones de Hot Rats de 1969). “Tell Me You Love Me”, que abría la cara dos del vinil original, es parte del músculo clásico del rock duro de Frank.
Flo & Eddie sobresalen en todo momento, pero en ninguna parte más que en el peculiar y lúdico pop de “Would You Go All The Way?”, que es seguido por los más de seis minutos de jazz festivo de la canción que le da título al álbum. En ella, Underwood proporciona un funk de saxofón alto eléctrico impulsado por el pedal wah-wah. Kaylan y Volman vuelven a la carga en “Rudy Wants To Buy Yez A Drink”, una canción cuyo tratamiento cálido y tropical revela el tema subyacente del descontento de Zappa con el Sindicato de Músicos. “Sharleena”, la canción que cierra el álbum, también está hecha a la medida para las voces de Flo & Eddie, con acento en el doo-wop, R&B y una melodía matadora que en el pasado se convirtió en una favorita de la radio nocturna.
Lanzado el 23 de octubre de 1970, Chunga’s Revenge cumple con toda la estética de Zappa y, aunque es posible que algunos no hayan entendido todos sus chistes, ha superado la prueba del tiempo.
