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‘Good Kid, mAAd City’ de Kendrick Lamar: Una lección sobre narrativa

Kendrick Lamar lanzó ‘Good Kid, mAAd City’ en 2012. El álbum no solo es parte del canon del hip-hop, también cambió la cultura.

Publicado el

de

de

Kendrick Lamar
Portada: Cortesía de Interscope Records

Los mejores discos conceptuales siguen teniendo sencillos fabulosos. Hay una razón por la que la gente conoce “Juicy” de Notorious BIG, “Mercy Mercy Me” de Marvin Gaye o “Ziggy Stardust” de David Bowie a pesar de que nunca escucharon los álbumes completos donde se incluyen. Esos sencillos por sí solos son lo suficientemente fuertes como para que incluso alguien con un conocimiento superficial de los álbumes de los que provienen no pueda negar el talento que hay detrás de ellos. Lo mismo podría decirse de “B__ch, Don’t Kill My Vibe” o “Swimming Pools (Drank)” del debut con un sello importante de   Kendrick Lamar, Good Kid, mAAd City.

Desde que K Dot lanzó Good Kid, mAAd City el 22 de octubre de 2012, el álbum no solo se convirtió en parte del canon del hip-hop, sino que también alteró la propia cultura de Estados Unidos a tal grado que incluso su estudio se ha incorporado al plan de estudios de varias universidades.

Recientemente nombrado uno de los 100 mejores álbumes de todos los tiempos por Apple Music, escucha Good Kid, mAAd City ahora.

La portada de Good Kid, mAAd City presenta una Polaroid de la infancia de Kendrick con sus tíos y su abuelo. Hay un biberón, una botella de 40 onzas y un tío muestra un signo de pandilla. Al fondo hay una imagen en la pared en la que aparecen Kendrick y su padre. Todos tienen los ojos tapados. Hablando sobre la portada, Lamar dice: “Esa foto dice mucho sobre mi vida y sobre cómo crecí en Compton y las cosas que he visto, a través de esos ojos inocentes. No ves los ojos de nadie más, pero ves que mis ojos son inocentes y tratas de averiguar qué está pasando”.

Una narrativa apasionante

El título de la portada también dice: “un cortometraje de Kendrick Lamar”. Esto no es un accidente. Good Kid, mAAd City es cinematográfico y cuenta una narrativa específica y apasionante. Es un día en la vida del protagonista, K Dot, cuando se convierte en Kendrick Lamar, se liga a su chica, roba una casa y pasa por una serie de desventuras que le hacen cuestionar la política del barrio.

La primera canción, “Sherane aka Master Splinter’s Daughter”, no es realmente el comienzo de la historia, sino que prepara el escenario para lo que viene después. Imagínate el comienzo de Perros de Reserva y sus ya famosos monólogos sobre Madonna y “No dar propina”. No necesariamente hacen avanzar la historia, pero crean el mundo en el que estás a punto de entrar. En esta canción te metes en la mente del personaje de Lamar, K Dot, quién es el protagonista de la historia. K-Dot se encuentra con una chica llamada “Sherane” y, como en una película de Tarantino, la historia no sigue exactamente un hilo sencillo. Está lleno de altibajos, giros y vueltas.

Los sketches que siguen a las canciones son concisos, una manera de presentar a los amigos, la madre y el padre de Kendrick. Son los que cohesionan completamente la historia. En el sketch posterior a “Sherane a.k.a Master Splinter’s Daughter”, la madre y el padre de Kendrick quieren que él traiga su camioneta de regreso a la casa. Una imagen de esta furgoneta también aparece en la versión de lujo del disco.

El estado del hip-hop

El sencillo “B__ch, Don’t Kill My Vibe” también sirve como una especie de introducción y tratado sobre el estado del hip-hop. La versión original cuenta con la voz invitada de Lady Gaga y se tituló “Partynauseous”. Sin embargo, surgieron problemas de calendario y finalmente su versión no terminó en el álbum. Más tarde la publicó ella misma, para sorpresa de Lamar. El sketch que finaliza “B__ch, Don’t Kill My Vibe” una vez más sirve para seguir impulsando la historia. En él escuchamos a los amigos de K Dot diciéndole que se reúnan con ellos en el auto donde tienen un CD de “beats”.

“Backseat Freestyle” y “The Art of Peer Pressure” fluyen juntos de forma natural. La primera cuenta una historia sobre K Dot haciendo freestyle con sus amigos en el auto soñando, algo que se escucha a través “Martin tuvo un sueño/Kendrick tiene un sueño”. La canción captura vívidamente imágenes sobre la complicidad de pasar un rato entre amigos cercanos y las alegrías simples de hacer hotboxing en un auto o freestyling con los colegas. Esta prepara el escenario para “The Art of Peer Pressure”, que es un momento muy importante en el desarrollo de esta narrativa.

Una caravana aparentemente inocente con amigos acaba convirtiéndose en una noche de fumar, beber y robar. Quizás no hay tanto bravuconería en todo este proceso, pero sí un gran conflicto interno. A pesar de la situación, la historia hace que sigas apoyando a K Dot y, de hecho, te sientas aliviado cuando elude a la policía. Pero luego el protagonista se enfrenta a un dilema: ¿Seguir el camino de sus compañeros o agachar la cabeza y ganar ese dinero?, lo que le lleva a “Money Trees”.

“Poetic Justice” nos regresa al inicio de la historia con Sherane. Un grupo de hombres ataca a K Dot solo porque es de un barrio diferente. Incluso después de robar una casa, se da cuenta de que el depredador puede fácilmente convertirse en presa.

La eterna lucha en el barrio

“Good Kid” y “mAAd City” también están vinculadas. “Good Kid” trata sobre la eterna lucha en el barrio. ¿Cómo puede alguien sobrevivir en un mundo en el que todo gira alrededor de si vistes de rojo o de azul y de dónde eres? Esta canción es otro punto de inflexión en la narrativa. K Dot se pregunta si podrá salir con vida. El ingeniero MixedByAli explicó con más detalle en una entrevista en Complex cómo “ser un buen chico es estar atrapado dentro de la caja y cómo [él] no tiene más remedio que seguir adelante a través del tiroteo, no tiene más remedio que entrar a las casas y robar, porque esto es lo que le rodea”. Sólo está haciendo lo que hace su gente.

Más adelante K Dot se vuelve a enfrentar al arma de doble filo que es la vida de las pandillas en “mAAd City”. Si no sigues el camino de la pandilla, no tienes protección. Sin embargo, si te alineas con una de ellas, te vuelves más propenso a la violencia. La canción se divide en dos partes: comienza con una introducción lenta que termina en un ritmo fuerte de club. El legendario MC de la costa oeste, Eiht, hace una aparición especial en esta canción en lo que es otro momento en el que Kendrick rinde homenaje al sonido hip-hop de Compton que le precedió.

Para el oyente ocasional, “Swimming Pool (Drank)” suena como una fiesta improvisada, pero si escuchas con atención es más bien un cuento con moraleja. En este punto de la historia los amigos de Kendrick deciden vengarse de las personas que pisotearon a Kendrick anteriormente, lo que resultó en la muerte del hermano de su amigo, Dave.

Cuestionando su vida como K Dot

“Sing About Me” hace que Kendrick piense en las tragedias que han impactado su vida. La primera es el ya mencionado Dave, la segunda es la hermana de una trabajadora sexual que fue el tema de una canción en el lanzamiento de su debut. Por último, escuchamos a “Kendrick” cuestionar por primera vez su vida como K Dot. La canción representa el bautismo y el encuentro con uno mismo.

Al final de Good Kid, mAAd City, habrás comprendido que la visión anterior de K Dot de que “el dinero, el poder y el respeto” son el fin de todo es un código peligroso para vivir. Y que “Real” es un reflejo de lo que pudo haber sido. “Ese fue el comienzo de mi reconocimiento de que todo lo que estaba haciendo durante esos días no era real”, dijo Lamar. “Todo el mundo tiene su propia percepción de lo que es un ‘verdadero ni__a’. La mayoría de las veces, un verdadero ‘ni__a’ es un gato callejero o alguien que realiza algún tipo de trabajo y ejerce violencia. Eso es lo que pensábamos que eran. Pero en ese disco, fui yo quien comprendió lo que es real”.

La canción final, “Compton”, podría haber aparecido al principio de la historia, aunque algunos la comparan con lo que suena durante los créditos de este álbum conceptual. También puede significar que el ciclo comienza de nuevo o un guiño a lo que depararán sus nuevos capítulos.

Good Kid, mAAd City, de Kendrick Lamar, se puede comprar aquí.

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