Las mejores canciones de Velvet Underground
Revisitar las mejores canciones de Velvet Underground sigue siendo una desafiante invitación a pensar de una forma distinta.
Nos quitamos el sombrero para siempre ante Brian Eno, quien dijo en una entrevista de 1982, que si bien el álbum debut de The Velvet Underground vendió solo 30,000 discos, todos los que compraron uno comenzaron una banda. Eno se refería a los innumerables grupos prometedores que en ese momento estaban haciendo covers de las canciones de los Velvet o copiando su sonido. Sin embargo, su observación también cargaba un significado más profundo: la música de The Velvet Underground (VU) cargaba consigo un desafío para empezar a pensar de manera diferente; una invitación a abordar tu vida de una forma más creativa. Con eso en mente, es sencillo entender de dónde vienen esas canciones verdaderamente transgresoras que forman parte de su catálogo. Algo que se combina con algunas de las más hermosas baladas de amor y otras tantas que son auténticas celebraciones rockeras. Dado que la formación principal de VU solo estuvo unida durante menos de cinco años (fue bautizada a fines de 1965 y Lou Reed se fue en agosto de 1970), las 20 mejores canciones de Velvet Underground en nuestra lista abarcan más de la mitad de su catálogo. Aún así, no fue una tarea fácil reducir las opciones para crear esta lista.
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20: Coyote (live)
En 1993, el cuarteto original realizó una gira de reencuentro que fracasó antes de llegar a los Estados Unidos. Sin embargo, su álbum doble en vivo Live MCMXCIII nos dejó una visión fascinante de lo que podría haber sido si lo hubiera hecho. Hay dos momentos particulares de esa grabación en donde la magia entra en acción: “Hey Mr Rain”, una vieja grabación descartada extendida hasta los 16 minutos y “Coyote”, la única canción nueva de la reunión: una misteriosa mini-epopeya, que también resultó una de las raras colaboraciones compositivas entre John Cale y Lou Reed.
19: I’m Sticking With You
La única vez que Lou Reed escribió algo muy simple y dulce para esta banda fue cuando hizo una composición para que Maureen Tucker la cantara. Este fue uno de los únicos dos momentos protagónicos que ella tuvo con el grupo. “I’m Sticking With You” es un dúo romántico que toma algunos giros musicales inesperados sin perder su dulzura. Grabado originalmente para Loaded (una canción pensada para que Maureen pudiera tener una participación en el disco aunque estuviera descansando de tocar la batería por su embarazo), este track terminó siendo incluída en VU. Con el tiempo, esta canción se convirtió en una de las favoritas de los fans y fue incluída nuevamente para el álbum de Live MCMXCIII.
18: Foggy Notion
Cuando Doug Yule ocupó el puesto de bajista que antes tenía John Cale, la banda se pasó la mayor parte de 1969 trabajando en un álbum lleno de melodías directas que quedó inconcluso. En ese periodo también mudaron parcialmente su base de operaciones a Yule, en Boston. En todo ese periodo, “Foggy Notion”, un arrogante tema rockero, resultó ser la canción más destacada de sus presentaciones en vivo. Así que aunque ésta canción no se lanzó hasta los años 80, como parte de la recopilación VU, los fanáticos de la banda The Modern Lovers, con sede en Boston también, ya estaban haciendo versiones de ésta canción en 1972.
17: Here She Comes Now
La joya de culto en el álbum White Light/White Heat es ésta canción breve y hermosa que se siente como un mantra. Es también la única clara influencia oriental entre las muchas canciones de Velvet Underground. En ella, Reed rompió más tabúes al jugar con los significados de “venir” en la letra. No es casualidad que The Cars, que solía tocar un cover de ésta canción en sus inicios, luego tuviera un éxito en las listas de popularidad titulado “Tonight She Comes”.
16: We’re Gonna Have A Real Good Time Together (live at The Matrix)
Esta también es una canción que salió de las sesiones de grabación abandonadas de 1969, un alegre tema rockero que lleva un imperdible estribillo que dice “na-na-na”. En esencia, es una de las canciones más amables y alegres de Velvet Underground. Aunque después Reed se ocupó de oscurecerla considerablemente cuando la rehizo para Street Hassle. “We’re Gonna Have A Real Good Time Together” también era de las favoritas de Patti Smith para abrir sus conciertos al inicio de su carrera.
15: Candy Says
Inspirado por un encuentro con la actriz transexual Candy Darling, Reed escribió sobre la disforia de género antes de que tuviera un nombre. Con ella, por primera vez la voz de Doug Yule abre un disco con la banda, dándole una inocencia (y un falsete) que Reed podría no haber logrado.
14: What Goes On
“What Goes On” es lo más parecido a una canción pop en términos estrictos entre todas las que tiene The Velvet Underground. Llena de ganchos de lado a lado, ésta fue resultado de la alineación que la banda tuvo en esa etapa en la que tenían su base de operación en Yule. Una que resultó tener un sonido un poco más amigable (apoyado en la sensibilidad rítmica de Tucker y las texturas del órgano Vox Continental) que el que tenían cuando en su formación todavía estaba el bajista Cale. Tal vez no sea la canción más profunda de los Velvet, pero podría decirse que es la más pegajosa y, por lo tanto, una de las que se versionan con más frecuencia. Eso sí, probablemente Bryan Ferry de Roxy Music lo hizo mejor aún mejor que ellos.
13: Femme Fatale
La mayor contribución de Andy Warhol a The Velvet Underground puede haber sido su sugerencia de que Reed escribiera una canción sobre Edie Sedgwick y la llamara “Femme Fatale”. Reed respondió con una canción que combinaba a la perfección dos de sus obsesiones: los celos sexuales y el doo-wop de Nueva York. Nico la cantó como si no supiera nada de lo segundo y todo de lo primero.
12: All Tomorrow’s Parties
Lou Reed se resistió a los esfuerzos de Andy Warhol de instalar a la modelo/actriz Nico como cantante principal de medio tiempo para el álbum debut de la banda. Pero es difícil imaginar esta canción, efectivamente un monólogo dramático sobre el encanto y el vacío de la cultura de fiesta de la era de Warhol, sin ella. Es incluso más evocadora que “Walk On The Wild Side”, la canción posterior y más famosa de Reed sobre esas mujeres mundanas.
11: New Age
El álbum Loaded fue diseñado para estar repleto de éxitos, pero aún quedaba espacio para una de las reflexiones más oscuras de Reed. Con una entrega que raya en la balada doo-wop, “New Age” cuenta el encuentro entre una actriz que se desvanece y un fan enamorado. Como de costumbre, Reed hace que la historia sea más convincente en virtud de lo que omite. “New Age” es el vehículo perfecto para la entrega vocal más fresca de Doug Yule.
10: White Light/White Heat
El segundo álbum de Velvet Underground fue, por mucho, el más extremo, y la canción que le da título, “White Light/White Heat”, fue la oda de Reed a la que entonces era su droga preferida. La avalancha de anfetaminas está bastante bien capturada por una interpretación de la banda que anticipa al punk rock, con el bajo de Cale ahogando a todos los demás rumbo a su final. La canción es sorprendentemente pegajosa (cuando consideramos la fuente de su inspiración) y fue el cover predilecto de David Bowie durante sus años con Ziggy, el preferido de los Velvets.
9: I’m Waiting For The Man
Por otro lado, la mayoría de las canciones sobre drogas de Reed estaban en esta línea fríamente detallista. Incluso si nunca tuviste la intención de conseguir heroína en las calles más sombrías de Nueva York, ahora sabrías cómo se sentía e incluso cuánto cuesta. Y, una vez más, la canción es perversamente pegajosa. Después de la suave apertura del primer álbum, “Sunday Morning”, este es el primer tema rockero entre todas las composiciones de Velvet Underground.
8: Rock & Roll
“Rock & Roll” es la única de las canciones de Velvet Underground que hoy en día corre el riesgo de sonar exagerada. Sin embargo, este tema de Loaded es uno de los himnos de rock más irresistibles que existen. Además, cualquiera puede relacionarse con la historia de Jenny, de cinco años, que ya tiene la edad suficiente para darse cuenta de que su ciudad es aburrida y que una estación de radio neoyorquina tiene la respuesta. Es increíble pensar que ésta canción no tuvo éxito en 1970. Al mismo tiempo, no es una sorpresa saber que a las estaciones de Nueva York (esas en el dial de FM) les encantó.
7: Venus In Furs
Dado que los Velvet tomaron su nombre de un libro sobre sadomasoquismo, hace sentido que el bondage sea el tema de la canción más sexual de la banda. Pulsante e intensa, “Venus In Furs” se desboca sobre la intimidad entre sus dos personajes; una canción que te hace sentir como un voyeur.
6: Pale Blue Eyes
La más desgarradora de todas las canciones de Velvet Underground, “Pale Blue Eyes”, trata sobre una larga historia de amor que el cantante no puede superar, y según la biografía de Anthony DeCurtis sobre Reed fue algo real en la vida del compositor en aquel momento. La estética de la banda durante su “Yule” funciona especialmente bien aquí. Sin embargo, también vale la pena resaltar otra versión muy respetable que Reed hizo con su banda de jazz de los 70 en Take No Prisoners.
5: Beginning To See the Light
¿Así que pensabas que las canciones de Velvet Underground no eran más que oscuras y peligrosas? Entonces intenta explicar cómo fue que se les ocurrió algo con tanta energía y lleno de vida, con tanto cinismo necesario entre sus líneas. Palabras para vivir intensamente: “Hay problemas en estos tiempos/Pero ¡guau! Ninguno de ellos es mío”.
4: I’ll Be Your Mirror
Otro triunfo de Nico, aunque nadie se dio cuenta en ese momento, fue la cara A del primer sencillo de Velvet Underground. Su gélida elegancia es perfecta para una de las canciones de amor más bellas de Reed, y una de las melodías más inquietantes de su carrera. Que la letra sea infinitamente generosa o simplemente obsesiva depende, por supuesto, de quien la escucha.
3: Sister Ray
Después de todos estos años, ésta canción todavía garantiza sacar a cualquier tipo anticuado de la habitación. La pieza central de White Light/White Heat es un fascinante noise jam de 17 minutos donde Reed se deja llevar por un mantra de decadencia. Se suponía que el rock era atrevido en 1968, pero esta canción hizo que casi todos los demás parecieran tímidos.
2: Sweet Jane
“Sweet Jane” es ciertamente una candidata a una de las mejores canciones de Velvet Underground. Sin embargo, pensándolo bien, no sería justo incluir en esta posición una canción en la que no participen Cale o Tucker. Un tema clave de Loaded, fue escrito y producido con la idea de convertirse en un clásico de rock. Tiene un sonido de guitarra indeleble, coro de gritos y una letra que es una declaración de amor (incluido un guiño a esas “madres malvadas” que intentan negarlo). De todas sus versiones, la que más nos gusta es aquella versión reeditada en donde aparece restaurada la gloriosa coda de “vino y rosas”.
1: Heroin
Esta es una canción visionaria en distintos niveles. Por un lado, el sonido de la banda – con la viola de Cale dando vueltas alrededor de las guitarras de Reed y Sterling Morrison, Tucker agregando los acentos de percusión correctos y una estructura que la lleva a un pico frenético en tres ocasiones – era diferente a todo lo demás que había en aquel momento. Por otro lado, las letras de Reed aquí son más poéticas que cualquier otra cosa en el rock, capturando la drogadicción como una búsqueda de trascendencia (y de alguna manera haciendo un desprecio lacerante de “Jim-Jims”). Esta canción te abre los ojos a una realidad diferente, una muestra de cómo se supone que debería ser el mejor rock’ n’ roll en esta tierra.
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