‘Straight Outta Compton’: El debut de NWA que te deja boquiabierto
‘Straight Outta Compton’ fue un bombazo imposible de ignorar. Dio inicio al gangsta rap y puso a la Costa Oeste en el mapa.
Straight Outta Compton llegó el 8 de agosto de 1988 como cuando te encuentras con un accidente de tráfico: no lo puedes ignorar. No sólo eso, sino que además sirvió para detonar el interés de la costa oeste hacia el hip-hop. Este grupo, que en aquel momento era relativamente desconocido, llegó repentinamente a la cima del hip-hop, a la vez underground y al mismo tiempo con visibilidad nacional, gracias a un álbum que te dejaba boquiabierto, pues su portada estaba diseñada para que pareciera como si la pistola de Eazy-E fuera lo último que verías en tu vida.
Straight Outta Compton de NWA fue nombrado recientemente uno de los 100 mejores álbumes de la historia por Apple Music. Escucha el álbum ahora.
Sin embargo, hay mucho más detrás de esta banda que una simple portada llamativa. Si todavía no has escuchado sobre NWA, es culpa tuya. Se trata de un crew con alto pedigrí; antes de ser parte de la banda, Dr Dre y Yella habían formado parte de World Class Wreckin’ Cru, un grupo que supo fusionar R&B y rap con cierto éxito. Por su parte, Ice Cube había estado en la CIA, lo que le había hecho ser más conocido por los B-boys del Reino Unido que por sus propios hermanos estadounidenses gracias a una aparición en las populares compilaciones Street Sounds Hip-Hop. Mientras tanto, Eazy-E se había ganado elogios por su sencillo “The Boyz-N-The-Hood”, escrito por Cube con un título digno de recordar. MC Ren se unió en 1987, justo cuando NWA estaba listo para lanzar esas bombas líricas que se convertirían en los temas del álbum NWA And The Posse. Arabian Prince y The DOC también estuvieron presentes, aunque sólo el primero de ellos alcanzó a aparecer en la portada de Straight Outta Compton. Si bien los miembros de NWA hasta ese momento no habían sido invisibles, pronto serían imposibles de evitar.
A pesar de que individualmente todos eran fuertes: la gloriosa escritura de Ice Cube y su estilo de micrófono de peso pesado, el carisma de forajido de Eazy-E, la producción de Dre combinada con el férreo tornamesismo de Yella, el estilo de rimar de Ren, en conjunto eran dinamita a cinco bandas. Era una banda que se trataba, sobre todo, de tener una actitud intransigente: estabas con ellos o no. El uso liberal de la palabra N rompió tabúes. Usarla no era algo inaudito en el rap, pero nunca se hizo con tanta libertad. El grupo decía que simplemente estaban informando sobre la vida de un suburbio de Los Ángeles que hasta ahora había sido ignorado. Decían las cosas como las sentían, le gustara o detestaran los demás. Si bien canción más notoria del álbum, “F__ck Tha Police”, sacudió varias sensibilidades y les provocó el hostigamiento por parte del FBI, para NWA, cantarla representaba darle voz a su barrio. La producción de la canción simboliza un juicio donde Cube, Ren y Eazy-E son llamados como testigos para declarar sobre la brutalidad policíaca. En términos de asesinato verbal de la ley, llegó a donde nadie se había atrevido a llegar antes al proclamar: “Tienen la autoridad para matar a una minoría”, como escupía un adolescente Ice Cube.
“Straight Outta Compton” es un disco que presenta al grupo como si fuera una pandilla: con escopeta recortada, asfixia y todo lo demás. “Gangsta Gangsta” comienza como una película policíaca, con Eazy-E sonando exactamente como el buscavidas que era antes de que llegara el éxito con NWA. MC Ren, un miembro infravalorado simplemente porque estaba siempre rodeado de grandes personalidades, da en el blanco en “If It Ain’t Ruff”, un alivio pesimista para la herencia del hip hop y una distracción de las clásicas batallas líricas del hip-hop. “Parental Discretion Iz Advised” es una provocación planificada, con la estrofa inicial de The DOC llegando al borde de lo aceptable justo antes de que Dre, Ren y Cube suban las apuestas con la culminante demanda de dinero a cambio de sexo que hace Eazy-E en el escandaloso verso final.
Luego viene otra bomba: “Express Yourself”, que lleva un sampleo con la melodía de la canción con el mismo título de Charles Wright a un lugar completamente nuevo. De hecho, este track generó el rumor de que Eazy-E (Eric Wright) era el sobrino de Wright Sr, lo que este funkero de la vieja escuela negó rotundamente. En la introducción de la canción, en la que los otros miembros de la banda presentan a Dr. Dre, la melodía que se escucha es lo más funky que se puede ser en esta vida. Es un momento donde Dre deja claro su su manera de pensar, incluyendo un curioso rechazo a las drogas (un llamativo contraste con la temática de su posterior clásico The Chronic). “Compton’s N The House (Remix)” es un remix en casete que destaca por una pausa cruda y la manera en la que aclama la supremacía de la ciudad natal de Ren, Dre y Eazy-E. Yella y Dre crearon “I Ain’t Tha 1”, que se hace notar por un loop ingenioso e intenso tomado de Brass Construction, que suena por debajo de las letras de Ice Cube, quien se queja de las mujeres que lo buscan por su dinero. El lenguaje de esta canción puede ser algo duro, pero la historia bien podría ser parte de cualquier vodevil o tener un paralelo con la narrativa de Salomé. La conversación se vuelve aún más oscura en “Dopeman (Remix)”, una advertencia para evitar el crack que es el culpable de esa sexualidad sombría que rodea el contexto del que surge NWA. “Quiet On the Set”, principalmente un escaparate para Ren, también merece atención; esto es hip-hop puro, que continúa más tarde en el track “Rock Creek Park”, donde samplean a The Blackbyrds.
El álbum, a pesar de ser producido mientras el grupo apenas se estaba definiendo a sí mismo, fue un éxito arrollador. Fue algo inesperado, ya que hasta hace poco varios de sus miembros todavía se enfocaban en crear melodías de electro-dance con sus proyectos anteriores. Sin embargo, lanzaron un álbum de hardcore contundente que representa la atmósfera social y cultural de su época a la perfección. Después de este disco, el hip-hop tuvo dos epicentros a casi 4.000 kilómetros uno del otro. Straight Outta Compton sigue siendo ruidoso, orgulloso e inquebrantable.