‘Anti’: cuando Rihanna rechazó al paradigma del pop
Después de dominar las listas durante más de una década, Rihanna estaba lista para hacer las cosas más personales en ‘Anti’.
Después de una carrera de siete álbumes creando éxitos pop, Rihanna trató de cambiar su fórmula como nunca antes. Pará romper un silencio de cuatro años – el más largo hasta ahora – Anti fue, como le dijo a Vogue, el resultado de hacer una música que “coincidiera con mi crecimiento personal”. Al convertirse en disco de platino en menos de 24 horas, el ícono del pop de Barbados logró superar sus miedos y ampliar aún más sus límites creativos. Al ascender al número uno en la lista 200 de Billboard, este álbum también convirtió a Rihanna en la primera artista femenina negra en figurar durante 200 semanas en las codiciadas listas. En el mundo del pop, donde suele existir mucha aversión por tomar riesgos, ella había demostrado, una vez más, que era capaz de cambiar las cosas.
Una llegada enigmática
Desde su álbum debut de 2005, Music Of The Sun, la superestrella había lanzado un nuevo álbum casi todos los años, siendo la edición de lujo de Good Girl Gone Bad lo que llenó el vacío en el 2008. Después de Unapologetic del 2012, Rihanna también comenzó a expandir su imperio en otras industrias, desde el cine hasta la moda, al mismo tiempo que lanzaba una serie de sencillos para apaciguar a las masas.
La diva del pop formó parte de un trío improbable en el sencillo folk “FourFiveSeconds”, que salió en enero de 2015 y que fue seguido rápidamente por el éxito de trap altanero “B__ch Better Have My Money”. En este último, Rihanna les recuerda a todos: “Don no actúes como si lo hubieras olvidado/yo tomo las decisiones, las decisiones, las decisiones”.
Con sonidos divergentes en cada sencillo, los críticos y fans no sabían qué esperar de Anti. La portada poco ortodoxa era igualmente indescifrable, mostraba a una joven Rihanna envuelta en un baño de pintura roja, sosteniendo un globo y usando una corona tan grande que le tapaba los ojos. El arte de la carátula también presentaba un poema en Braille, titulado “If They Let Us, Part I”, que hizo que el arco narrativo del álbum fuera más claro: “A veces tengo miedo de que me malinterpreten. Es simplemente porque lo que quiero decir, lo que necesito decir, no será escuchado. Escuchado de la manera en la que realmente lo merezco”.
Manteniendo su estatus
A pesar de un meticuloso plan de lanzamiento, Anti se filtró el 27 de enero de 2016, mismo día que la cantante lanzó su primer sencillo, “Work”, y dos días antes de la fecha de lanzamiento programada del álbum.
Aunque “Work” compartía un ADN dancehall similar al de los álbumes anteriores de Rihanna, el disco rendía homenaje a sus raíces caribeñas en algo más que la producción. Al cantar en patois jamaicano, Rihanna confundió a la mayoría de los escuchas internacionales, quienes inicialmente descartaron la letra como un dialecto incomprensible. Sin embargo, en la misma entrevista de Vogue la cantante explicó cómo “Work” era uno de sus sencillos más auténticos: “Así hablamos en el Caribe. Es muy roto y es como si pudieras entender todo lo que alguien quiere decir sin siquiera terminar las palabras”.
De esta manera, si bien muchos oyentes quedaron atrapados por el coro pegajoso, que ayudó a impulsar la canción al número uno en la lista Billboard Hot 100, se perdieron el contexto más matizado.
Con un verso invitado de Drake, “Work” opera en dos sentidos: trabajar duro para mantener una relación, mientras que también se trabaja duro para arreglarse a uno mismo. Tal como dice Rihanna: “Tengo que hacer las cosas a mi manera, cariño”, en el tema que abre Anti, “Consideration”, “Work” también se refiere a cómo la cantante trabajó incansablemente para mantener su estatus.
Un álbum de estados de ánimo
Aunque la mayor parte de la discografía de Rihanna está marcada por llamativos números de dance-pop y baladas de R&B listas para la radio, Anti está compuesto por estados de ánimo. Con una producción más reducida, su voz ocupa un lugar central sobre ritmos minimalistas, a la vez que adopta el enfoque más aletargado y rebelde de las variaciones del Pop-R&B emergente de aquel momento. Para lograr esta estética, reclutó a todos los arquitectos estelares de este sonido, incluidos The-Dream, Timbaland y The Weeknd.
Si Rated R era todo pop-rock rimbombante y del tamaño de un estadio, Anti (y su segundo sencillo, “Kiss It Better”) rindió homenaje al lado más sexy y funky del pop de los 80. Si bien no tuvo tanto éxito comercial como algunos de sus mayores éxitos, la sensual “Kiss It Better” fue emblemática de todo por lo que Rihanna había estado luchando hasta ese momento. Canalizando a Prince en todo momento, Rihanna también le dio a la canción el video cargado del erotismo que se merecía.
A lo largo de la década de 2010 Rihanna resultó ser la forajida de la música pop. Sin embargo, incluso con este estilo poco ortodoxo logró encontrar éxitos que llegaron a grandes audiencias. Después de “Kiss It Better”, ella volvió a su personaje combativo con el éxito de trap-R&B “Needed Me”, donde desafió lo que se esperaba de ella al declarar: “¿No te dije que era una salvaje? / Al diablo tu caballo blanco y tu carruaje”, en este éxito del top 10.
Así como Anti fue un experimento en cuanto al género y la producción, Rihanna también usó el álbum para explorar nuevas técnicas vocales. Desde su acento isleño en “Work” hasta la entrega entrecortada que empleó para “Desperado”, Rihanna juega con diferentes personajes en cada pista. “Woo” presenta aún más distorsión vocal, además de la voz invitada y producción de Travis Scott, todo mientras que Rihanna canta sobre una relación intermitente.
Una rebelión popular
Solo por el título, está claro que Anti fue una reacción a la música popular de aquel momento. Dicho esto, Rihanna siguió expresando su deseo de crear “música atemporal”, que es donde encaja “Love On The Brain”.
La balada doo-wop-soul resulta más oscura de lo que parece a primera vista. Como confiesa Rihanna: “Me supera, pero me jode muy bien”. Un año después del lanzamiento de Anti y la gira mundial que lo acompañaba, “Love On The Brain” alcanzó el Top 5 en el Hot 100 de Billboard. Por otra parte, la balada acústica “Never Ending” está claramente inspirada en Coldplay y sus colaboradores anteriores (se había sentido como en casa en el álbum Mylo Xyloto de esa banda); la cual además toma prestada una melodía vocal de otra canción básica contemporánea para adultos, “Thank You” de Dido.
La segunda mitad de Anti está llena de cortes más sensuales y downtempo. Tanto “Yeah, I Said It” como “Same Ol’ Mistakes” ven a Rihanna en su punto más vulnerable. Producida por Timbaland, la primera es una apasionante comedia que hace un guiño al R&B temperamental pero de andar tranquilo de los 90 y recuerda a la canción “Skin”, de su álbum de 2010, Loud.
Una naturaleza exploratoria
Una de las mayores sorpresas en Anti fue la interpretación fiel de Rihanna de “New Person, Same Old Mistakes”, la canción del álbum Currents de Tame Impala. Rediseñada y retitulada como “Same Ol’ Mistakes”, Rihanna canta la canción desde una perspectiva femenina, dándole un nuevo significado artístico. Es aquí donde se da cuenta de que no puede detenerse en los errores que sigue cometiendo y aprende a amar a la persona en la que se ha convertido.
Al final del álbum, Rihanna muestra su talento vocal en una serie de baladas. En “Higher” canta con abandono, aprovechando la parte más cruda y rasposa de su voz, mientras que el tema de cierre “Close To You” es el tipo de canción de referencia para entender todo por lo que ella había estado luchando durante toda su carrera. En conjunto, la naturaleza exploratoria de Anti reveló más facetas de la inquietud creativa de Rihanna, lo cual agregado a un camino que se alejaba cada vez más de la música, convertía al álbum en lo que llegó a parecer una declaración final.
