‘It’s Hard’: los Who están enterrados, o eso pensó Pete Townshend

Nadie dijo que sería fácil para The Who seguir adelante después de la muerte de Keith Moon. Sin embargo, encontraron la manera de seguir siendo relevantes e inventivos con el lanzamiento de 1981 Face Dances. A pesar de ello, Pete Townshend admitiría más tarde que sintió que para ese entonces se había abierto un abismo entre la banda y la generación de jóvenes de la época.

Cuando apareció It’s Hard, el siguiente álbum de The Who, en septiembre de 1982, el lanzamiento se apresuró para cumplir con la fecha límite de su inminente gira. Como recuerda Townshend en su autobiografía Who I Am, el resto de la banda sabía mucho antes de que terminaran esas lucrativas fechas que Pete anunciaría su partida.

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It’s Hard hizo su debut en las listas de Estados Unidos el 25 de septiembre y escaló al número 8 con una estancia de 32 semanas. Pete pensó en aquel momento que, en sus propias palabras, The Who estaba “enterrada” y, en términos de nuevos álbumes, eso resultaría ser cierto para toda una generación. Así fue hasta la notable reunión del álbum Endless Wire 24 años después.

Roger Daltrey diría en entrevistas posteriores en la década de 1980 que la única canción que realmente le gustaba en It’s Hard era “Eminence Front”, que estaba algo orientada al dance. Pero a pesar de todas las circunstancias apresuradas de su producción, Townshend consideraba al álbum como un éxito creativo y elogió a Daltrey por dos interpretaciones en particular.

La balada pianística “One Life’s Enough” era, dijo Pete, “sobre la aceptación y el simple placer de hacer el amor”. La describió como una de las interpretaciones vocales favoritas de Roger. La más rockera “Cry If You Want” era una canción que Pete había tratado de cantar para un proyecto solista anterior, y para la cual Daltrey se había aprendido la letra de memoria. “Lo logró, casi se desmaya por falta de aliento”, escribió Townshend.

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